domingo, 18 de septiembre de 2016

EL ES­OTER­IS­MO DE LOS NÚMEROS




Los números y las op­era­ciones teosó­fi­cas — Sig­nifi­ca­do de los números.


LOS NÚMEROS



El con­cep­to que se tenía de los números en la antigüedad es casi de­scono­ci­do en nue­stros días.

Con­sideran­do que la unidad es el tér­mi­no con­stante que in­ter­viene en la for­ma­ción de la can­ti­dad, cualquiera que és­ta sea, los an­tigu­os veían en el número la ex­pre­sión de leyes ab­so­lu­tas. De aquí la ven­eración por el número 3 y el 4, per­fec­ta­mente in­com­pren­si­ble para nue­stros matemáti­cos.
Es ev­idente que si los an­tigu­os no hu­bier­an cono­ci­do otras op­era­ciones numéri­cas que las us­adas en nue­stros días care­cerían de ex­pli­cación las ideas en­señadas en las uni­ver­si­dades de la In­dia, de Egip­to y de Gre­cia.
¿Cuáles son, pues, es­tas op­era­ciones, de­scono­ci­das por nue­stros sabios?


Dos: la re­duc­ción y la adi­ción teosó­fi­ca.

Es­tas op­era­ciones se di­cen teosó­fi­cas, porque nos in­tro­ducen en el mun­do de las “leyes es­en­ciales” de la nat­uraleza. Es­tas en­señan­zas forma­ban la base de la in­struc­ción sec­re­ta y oral que se trasmitía a de­ter­mi­nadas per­sonas pre­dis­pues­tas, y se les da­ba el nom­bre car­ac­terís­ti­co de “Es­oter­is­mo”.


1° RE­DUC­CIÓN TEOSÓ­FI­CA



La re­duc­ción teosó­fi­ca con­siste en re­ducir a un so­lo dígi­to las cifras que en­tran en la com­posi­ción de un número da­do, tal co­mo se verá en los ejem­plos sigu­ientes:



10 = 1 + O = 1

11 = 1 + 1 = 2
12 = 1 + 2 = 3
126 =1+2+6=9
2488 =2+4+8=22=2+2=4

Es­tas op­era­ciones cor­re­spon­den a lo que lla­mamos hoy “la prue­ba del nueve”.

2° ADI­CIÓN TEOSÓ­FI­CA

La adi­ción teosó­fi­ca con­siste en sumar ar­it­méti­ca­mente la se­rie nat­ural de los números, comen­zan­do por la unidad, has­ta in­cluir el número prop­uesto. Por ejem­plo, el número 4 será igual a:

1+2+3+4=10

El número 7 igual a 1+2+3+4+5+6+7= 28 igual 2 + 8 = 10.
El 12 igual a 1+2+3+4+5+6+7+8+9+10+11+12 = 78.

Re­duc­ción y adi­ción teosó­fi­cas son las dos op­era­ciones que deben dom­inarse para com­pren­der la antigüedad.
Aplique­mos es­tos pro­ced­imien­tos a cualquier número, para de­scubrir la ley que rige su pro­gre­sión.
La re­duc­ción teosó­fi­ca nos mues­tra in­medi­ata­mente que to­dos los números se re­ducen a los nueve primeros dígi­tos de la se­rie nat­ural.
Mas es­ta con­sid­eración no es to­davía su­fi­ciente; una ob­ser­vación más aten­ta nos traerá nuevas luces.
Ten­emos que los números 1, 4, 7 y 10 son iguales a 1 puesto que 1=1.

4=1+2+3+4=1
7=1+2+3+4+5+6+7= 28 =2+8= 10 =1
10=1
De man­era que el dígi­to 1 se re­pro­duce de­spués de la se­rie de ca­da tres, es­to es:
1. 2. 3.                  4.       5.       6.
4 = 10 = 1                  7 = 28 = 10 = 1
Se po­dría es­cribir, por lo tan­to:
1.      2.      3.
(1)
4.      5.      6.
(1) etc.
De la prece­dente con­sid­eración, re­sul­ta:
1°, que to­dos los números re­pro­ducen, en su evolu­ción, los cu­atro primeros;
29, que el úl­ti­mo número de los cu­atro con­sid­er­ados, es­to es el N9 4, rep­re­sen­tará la unidad en una oc­ta­va difer­ente.
La se­rie de los números puede en­tonces es­cribirse así:
1.      2.      3.                  13.      14.      15.
4.      5.      6.                  16.      17.      18.     
7.      8.      9.                  19. etc.
10.       11.      12.
Ob­serve­mos que los números 4, 7, 10, 13, 16, 19, etc., rep­re­sen­tan difer­entes con­cep­ciones de la unidad, tal co­mo lo prue­ba la adi­ción y re­duc­ción teosó­fi­ca de los mis­mos.
1=1
4=1+2+3+4= 10 =1
7=1+2+3+4+5+6+7=
28=2+8= 10 =1
10 = 1
13 =4=1+2+3+4= 10 =1
16=7=1+2+3+4+5+6+7=28+10=1
19 = 10 = 1 etc., etc.
Se com­prue­ba en­tonces que de­spués de ca­da tres cifras la se­rie vuelve br­us­ca­mente a la unidad, mien­tras que lo hace en for­ma pro­gre­si­va en­tre las dos in­ter­me­di­arias. Repi­ta­mos una vez más que el conocimien­to y el es­tu­dio de las leyes que rigen las can­ti­dades, en la for­ma que acabamos de hac­er­lo, nos da la clave de las cien­cias ocul­tas. Re­sum­ien­do: to­das las can­ti­dades pueden ser re­duci­das a la se­rie de los cu­atro primeros dígi­tos, dis­puestos en el or­den sigu­iente:
1.      2.      3.
4.
Val­or de los doce primeros números que da la clave de la cifra (78) cor­re­spon­di­ente a las car­tas del Tarot:
1 = 1
2 = 1 + 2 = 3
3 = 1 + 2 + 3 = 6
4 = 1 + 2 + 3 + 4 = 10
5 = 1 + 2 + 3 + 4 + = 15
6 = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 = 21
7 = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 + 7 = 28
8 = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 + 7 + 8 = 36
9 = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 + 7 + 8 + 9 = 45
10 = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 + 7 + 8 + 9 + 10 = 55
11 = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 + 7 + 8 + 9 + 10 + 11 = 66

12 = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 + 7 + 8 + 9 + 10 + 11 + 12 = 78


Gerard Encause (Papus)

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